Historias 2012: Oros inesperados

Ensenada, Baja California.- Las medallas, según los pronósticos, podían llegar en gimnasia o tiro con arco.  Daniel Corral en la primera disciplina y el “Abuelo” Álvarez en la segunda. En la natación, Arturo Pérez Vertti acudió más para mejorar su tiempo que para competir por los primeros puestos, como lo hará en 2016. Así estaba el panorama de Baja California y sus representantes pocos días antes de los Juegos Olímpicos de Londres.

Esas eran, en realidad, las medallas que podrían llegar gracias al proyecto deportivo establecido en Baja California. Pero, finalmente, las medallas llegaron por otra vía. Y no fueron plata ni bronce. Fueron dos oros, que en términos prácticos cuentan como uno. La disciplina: futbol. Uno de los medallistas, Héctor Herrera, es un mediocampista de Rosarito y emigrado desde muy joven a Pachuca para convertirse en un joven debutante dentro de la primera división y seleccionado nacional tanto en categorías menores como en la mayor. El otro, Jorge Enríquez, el “Chatón”, nació en Mexicali, pero desde pequeño se trasladó a Tepic, Nayarit, junto a su familia para iniciar una carrera que lo llevó a las Chivas Rayadas de Guadalajara. Los dos son medios de contención. Pero ambos anotaron gol en la victoria de México sobre Senegal durante los cuartos de final de Londres 2012. Después llegaron las victorias de la selección nacional sobre Japón y Brasil en la semifinal y la final. Así Baja California registró a sus históricos medallistas de oro olímpico.