Marco Deportivo :: ¡Ay, ay, ay, ay!







¡Ay Carpio! Juan, fuiste el primero con el que traté. Todavía estabas en la vieja oficina a un costado del gimnasio municipal. Aquellos tres años fueron de comunicación constante. Petición de entrevista y respuesta inmediata. Dependencia paramunicipal en gestación. Guiaste los primeros pasos, construiste los cimientos. Cierto, también decían que aquello parecía el instituto municipal del beisbol. Al finalizar el trienio te fuiste, con críticas y reconocimientos como todos, pero cumpliendo con tu responsabilidad de informar.

¡Ay Nava! Emeterio, fuiste el segundo con el que traté. Ya estabas en la nueva oficina del deportivo Sullivan. Aquellos años fueron de comunicación constante. Petición de entrevista y respuesta inmediata. Directo, frontal, organizado y con las metas bien definidas para tratar de consolidar el instituto. Cierto, también decían que aquello parecía el instituto municipal de atletismo. Al finalizar el trienio te fuiste, con críticas y reconocimientos como todos, pero cumpliendo con tu responsabilidad de informar.

¡Ay González! Víctor, fuiste el tercero con el que traté. A pesar de las críticas insistentes, aquellos tres años fueron de comunicación constante. Petición de entrevista y respuesta inmediata. Lleno de proyectos, sociable, entusiasta, deportista. Cierto, los aviadores en la nómina, las teiboleras en el box, las órdenes desde Palacio Municipal, los pleitos en la Hidalgo. Al finalizar el trienio te fuiste, con críticas y reconocimientos como todos, pero cumpliendo con tu responsabilidad de informar.

¡Ay Borrego! Felipe, fuiste el cuarto con el que traté. De línea dura –dicen algunos–, pero aquellos tres años fueron de comunicación constante. Petición de entrevista y respuesta inmediata. Los puntos sobre las íes, la réplica inmediata sin rehuir a ningún tema, discrepancias respetuosas entre funcionario y medio, atento siempre a la prensa. Cierto, también decían que aquello parecía el instituto municipal del ahorro. Al finalizar el trienio te fuiste, con críticas y reconocimientos como todos, pero cumpliendo con tu responsabilidad de informar.

¡Ay Carpio, Nava, González y Borrego! Ya díganle a Soto que no pasa nada si declara para dar a conocer sus proyectos, que de todas maneras la van a ratificar y que la prensa sólo es el conducto para informar a la ciudadanía.

¡Ay Juan, Emeterio, Víctor y Felipe! Ya díganle a Martha que un funcionario público no informa si quiere o no, o si está de humor o no, o si es encargado de despacho o director ratificado, o si es muy orgulloso y ya se encaprichó en no atender a la prensa aunque tenga dos meses recién cumplidos en el puesto.

¡Ay ex directores, ya hasta los extraño!

mdominguez@elvigia.net

md_niebla@hotmail.com





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