Rescatado por «El Terrible»
Ensenada, Baja California.- Después de ser recibido por su esposa y su hija, Javier «Cobrita» Mendoza rompió en llanto y recordó que apenas hace un año estuvo a punto de retirarse, de no ser por la intervención del ex campeón mundial Erik «Terrible» Morales.
Agotado tras la pelea contra el filipino Milán Melindo, ya con una defensa exitosa de su título minimosca de la Federación Internacional de Boxeo, el boxeador tijuanense dijo: «yo ya estaba retirado del boxeo y justamente regresé para ser campeón del mundo».
Emocionado, sin contener el llanto, «La Cobrita» explicó que «en ese momento no había peleas importantes que llegaran a mí, ni un mercado que pudiera recibirme en el medio boxístico ya cuando tenía una familia que sacar adelante».
Entonces, refirió, «llegó Erik Morales, quien me llamó para avisarme que estaba en puerta la pelea de campeonato del mundo (ante Ramón García Hirales) y eso siempre se lo voy a agradecer, igual que a la empresa (Zanfer)».
«Tengo a mi esposa y mi hija que están aquí conmigo y para ellas es todo esto, la carrera que quiero construir», apuntó.
«Terrible»
Erik Morales señaló que «La Cobrita» fue formado por su equipo de trabajo. «Nosotros le construimos su carrera amateur y después se nos fue».
«Luego lo busqué, regresó y ahora, ya ven, es campeón mundial», apuntó.
Las cualidad de Javier Mendoza, dijo, «es su juventud, fuerte, con ganas y sobre todo con disciplina para trabajar fuerte, como tiene que hacerlo todo boxeador que aspira a mantenerse como campeón del mundo».
