«Rognoso» y Rocky ganaron sus peleas frente a los sinaloenses

Mario Meraz venció a Cristian Solano

Ensenada, Baja California.- Los discursos de Cristian “Olímpico” Solano y Andrés “Ingeniero” Villamán quedaron distantes de lo que hicieron sobre el ring la noche del sábado durante la función que la empresa Baja Boxing presentó en Ensenada.
El primero prometió un nocaut sobre el local Mario “Rocky” Meraz, pero su pasividad, con breves lapsos en los que pareció reaccionar hasta exhibir la poca actividad de Meraz los últimos años, fue coronada con un par de caídas al ser impactado al cuerpo.
La primera durante el sexto round y la segunda cuando al minuto con siete segundos del séptimo cuando, para sorpresa de un sector de la afición, el boxeador que llegó con el antecedente de haber perdido decisiones con “Canelo” Álvarez y Chávez Junior, dijo ya no más.

Momentos después, en la pelea estelar, por el título plata de la división welter que avaló el Consejo Mundial de Boxeo, Andrés Villamán, que pronosticó una batalla en la que el intercambio de golpes sería la constante, apenas soportó hasta el minuto y 26 segundos del tercer round.
Entonces, un impetuoso Alessandro “Rognoso” Riguccini se lanzó al frente, más con ganas que con técnica, para acabar con un triunfo por nocaut y con el título en su poder.

La función con sede en el gimnasio municipal Óscar “Tigre” García también recibió el regreso de Sergio “Micky” López, quien puso fin a dos años de pausa boxística para acabar con Azael Loera a los 44 segundos del segundo round.

El rosaritense Diego “Flako” Alemán demostró su mejor paso en el boxeo de paga que el rival al que enfrentó, Alberto “Demonio” Ascencio, y lo noqueó siete segundos antes de que sonara el primer campanazo.

Otros nocauts vistos por la afición que ocupó alrededor de la mitad de las localidades del gimnasio, fueron los del ensenadense Saúl “Navajo” Guardado sobre Jorge Valenzuela, así como los propinados por Rodolfo Orozco y Brandon Sañudo a Jesús Eduardo Soto y Jesús Cantú.

Todo comenzó de manera promisoria, pues los boxeadores de casa, Giovany Pinedo y Meño Alvarado, protagonizaron la mejor pelea de la noche; el primero mandó a la lona al segundo en el cuarto y último round, para más tarde ser declarado vencedor de modo unánime.