RÉPLICA

Por Fernando Ribeiro Cham

“Siempre es el momento apropiado para hacer lo correcto”.

• Martin Luther King

Laura. Lourdes.

Les escribo en su carácter de responsables del desarrollo deportivo de sus municipios, pero especialmente lo hago como colega de profesión, esa actividad que elegimos para ser fuente de desarrollo personal, para coadyuvar en mejorar nuestro entorno social, para llevar el sustento a nuestra mesa.

Hoy la profesión les presenta un reto a ambas, uno que incidirá en la perspectiva futura acerca del grado de especialización que conlleva nuestra formación profesionista.

La UACH y la UEEP otorgaron a ustedes una serie de herramientas a través del conocimiento formal, que dieron vida a un perfil de egreso y la administración pública deportiva se encontraba en esa génesis.

Hoy ustedes se sientan en la mesa, quizá por lo fortuito que resultan los vaivenes del servicio público, con alguien que ha desdeñado el conocimiento formal, pero más grave aún, con una persona que ha violado por más de 100 días, la ley de cultura física y deportes del estado con su nombramiento.

No sé si ayer en su análisis de la norma legislativa habrán llegado al 22 en su fracción tercera, pero si fue así, imagino que habrán pensado en la procedencia de tal requisito, mismo que fue votado de manera unánime por los legisladores anteriores y que contrario a lo que algunos piensan, de forma errónea, no tenía ni tiene al día de hoy un destinatario específico, pues quién hubiera pensado hace más de cinco años, que la decisión sería modificar para que quien incumpla no caiga más en ese acto, en lugar de cumplir desde un inicio con tal designación. Les pido se tomen el tiempo de leer la exposición de motivos de la iniciativa que originó tales requisitos.

Estimada Laura, viviste en carne propia la rigidez de la norma. Tu perfil profesional no estuvo en tela de juicio, sí la necesidad de que llegara ese documento probatorio, pero jamás escuché de ti el que propusieras que se retirarán de la reglamentación municipal los requisitos que se te exigían y claro, pudiste quizá pedírselo al alcalde y a la mayoría de la coalición que lo acompaña en el cabildo, pero no fue así.

Estimada Lourdes, imagino tu ímpetu en el aula con los universitarios, con los futuros profesionistas, con ellos que invertirán más de siete mil seiscientas horas en el estudio formal de la actividad física y deporte. Avalar el retirar requisitos de orden académico, sería un acto contradictorio, sería lo mismo que decirles a esos jóvenes que su profesión es tan general que cualquiera puede desarrollarla, que incluso hay quienes afirman que “conocen de deporte, pues es lo único que miran en la televisión”.

Permítanme compartirles un argumento adicional y es que me he enterado que el diputado Julio Vázquez afirma que el establecer requisitos del orden académico para un servidor público es violatorio para los derechos humanos del mismo. Lo que omite el legislador, fue el sentido de su voto en la ley que creó la fiscalía general del estado y en los requisitos para ocupar dicho cargo, requisitos académicos y que en ningún momento le parecieron al legislador violatorios a los derechos humanos.

Lourdes, Laura, los números 989110 y 11876448, son más que simples números de un registro, por el contrario, deben representarles un compromiso con la profesión que compartimos.

Sé que serán los legisladores quienes decidan sobre la posible reforma al 22 de la ley estatal en materia deportiva, pero su voz, en alguna medida, puede ayudar a la reflexión y servir como un dique ante lo que sería un retroceso en lo poco que la profesión ha conseguido en el ámbito legislativo.

Concluyo diciéndoles que entiendo que puedan esgrimir ese argumento de la necesidad de colegiar decisiones. Me encantaría, aunque es una decisión netamente personal, ver al profesor Ranfla, quien por cierto fue impulsor de una iniciativa muy similar en la legislación educativa estatal, defender el espacio en la norma legislativa que logró la profesión. Que se sumaran las voces de Edgar Alarcón, de Emilio Arrayales, de todos los que en alguna manera inciden en la formación profesionista, en el desarrollo de recursos humanos especializados. Ojalá en lugar de debatir sobre una posible pérdida de un espacio para el tecnicismo y el conocimiento formal, lo hiciésemos sobre la necesidad de ampliar tal espectro.

Lourdes, Laura, nuestra profesión tiene en ustedes a dos exponentes. Hago votos para que también encuentre en ambas, a dos férreas defensoras de los escasos espacios legislativos que la profesión ha ganado.P.d. Les comparto este enlace del trabajo legislativo que dio origen al esquema de especialización en la administración pública deportiva.

https://www.congresobc.gob.mx/Documentos/ProcesoParlamentario/Dictamenes/202_GOBER_28MAY13.pdf