Resumen 2023: Gloria a Fernando, Julio al olvido
El 34 del Toro ya aparece en lo más alto de Dodger Stadium junto al de las figuras legendarias del equipo angelino.
Más que números, lo que Fernando Valenzuela entregó al beisbol y a los Dodgers de Los Ángeles fue un fenómeno de popularidad generado tanto por su calidad como por su carisma.
El chico humilde del pueblo sonorense de Etchohuaquila irrumpió en las Grandes Ligas durante 1981 para ganar el Cy Young y la Serie Mundial ante los Yankees, todo en su año de novato.
Además convirtió a los Dodgers en el equipo más seguido por la afición de origen mexicano de Los Ángeles, por años ofendida frente al desalojo de familias de ese origen de la zona donde se construyó el estadio que sería casa de los recién llegados de Brooklyn.
Justo homenaje al legado del hoy comentarista de radio en cada jornada de los Dodgers. La ceremonia fue en agosto, previo a un juego contra Colorado.
En contraste, Julio Urías, el chico de Culiacán que irrumpió en el panorama de las Grandes Ligas como un ejemplo de fortaleza al superar múltiples cirugías en uno de sus ojos hasta llegar a convertirse en pieza clave de los Dodgers campeones de 2020, tiró todo por la borda los primeros días de septiembre de 2023.
Pese a ya haber librado una primera denuncia por violencia doméstica, el lanzador zurdo reincidió al ser detenido a la salida del juego de futbol entre el local LAFC y el Inter de Miami de Lionel Messi tras presuntamente agredir a una mujer en el estacionamiento del estadio.
Fue defenestrado de manera inmediata.
Ni huella de Julio por los rumbos de Chávez Ravine.