Equipo profesional comparte los secretos de su éxito. Asesoría especializada. Garantizamos resultados, siempre y cuando siga los siguientes consejos:

Uno. Busque una liga en decadencia, preferentemente urgida de dinero. Negocie la compra de la franquicia en abonos chiquitos. Termine de pagar en dos o tres años. Hágase el interesante.

Dos. Engatuse a cualquier liga amateur para que comparta su campo. Con el tiempo, a base de periodicazos, hasta le puede “bajar” el escenario. No es su problema que la liga tenga medio siglo residiendo ahí. Le sugerimos que elimine la palabra “agradecimiento” de su vocabulario. Estorba.

Tres. Si su ciudad carece de espectáculos, usted está del otro lado. Presente música, escándalo y venda cerveza. Con eso le garantizamos butacas llenas, a pesar de que el nivel de la liga esté de la patada. En tierra de ciegos, el tuerto es rey.

Cuatro. La nómina es otro tema menor. Busque convenios con equipos de la liga mayor para que le manden a la mayoría del plantel con todo y los sueldos pagados. Sólo tendrá que invertir en uno o dos jugadores locales y tres o cuatro extranjeros que habrán quedado al margen de algún equipo importante, así que están urgidos de contratarse. Regatee.

Cinco. Coquetee con la iniciativa privada. Diga que la liga es del más alto nivel, que no hay mejor inversión que la que se hace en el deporte. Los empresarios, con tal de que los invite a las inauguraciones y a las presentaciones donde estarán las cámaras y los micrófonos, hasta pagarán por ser parte del proyecto. Véndales caro, muy caro.

Seis. Si algún jugador destaca sobre el resto, no le cumpla con el dinero que le prometió. Si insiste en cobrar, “quémelo”, desacredítelo. Qué importa que sea el consentido de la afición. El único consentido de usted debe ser su dinero.

Siete. Aunque la liga está desahuciada, los campeonatos son caprichosos, tardan en llegar. Pero eso no importa. En una ciudad sin opciones de entretenimiento, el público no exige. Pueden pasar cinco temporadas sin título y todos tan contentos. Los aficionados son nobles. Hasta lo defenderán de las críticas. Diga que todo lo hace por satisfacerlos a ellos. Aprovéchelos, úselos como escudo.

Ocho. Si le fue muy bien, si la franquicia es un éxito, no lo diga. Argumente números rojos al final de cada temporada. A la gente le simpatizan los mártires. Sea una víctima.

Nueve. Peléese, peléese con medio mundo, sobre todo si su equipo es campeón. Dése ese gusto.

Diez. No gaste, pídale todo al gobierno, insulte y menosprecie a los funcionarios de las más altas esferas, y truénele los dedos al gobernador para que lo atienda. Crézcase y exija. Sea soberbio y altanero.

Siguiendo estos consejos, tiene usted garantizados: ingresos seguros, un negocio redituable, influencias y codearse con las más altas esferas de la sociedad.

Siendo así, felicidades, su barco está listo para zarpar.

mdominguez@elvigia.net

md_niebla@hotmail.com





Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.