2018, año del bicampeonato para los Marineros de Ensenada

Ensenada, Baja California.- Nuevamente con los Diablos Rojos del México y los Guerreros de Oaxaca como abastecedores de talento, los Marineros de Ensenada consumaron el bicampeonato de la Liga Norte de México durante 2018.

El equipo, ante la salida de Víctor “Flamingo” Bojórquez rumbo a los Diablos Rojos de la Liga Mexicana, hubo de confiar en dos elementos más de esa misma casa: Sergio Omar Gastélum y Gerónimo Gil.

El primero mantuvo a los campeones en los primeros planos, antes de mudar a Oaxaca para fungir como coach primero y como manager después de los Guerreros, equipo al que incluso llevó a la Serie del Rey en la segunda mitad del año.

Pero el grandes ligas Gerónimo Gil supo conservar a flote el rumbo del plantel que terminaron líderes para más adelante imponerse a los Algodoneros de San Luis en la semifinal y a los Freseros de San Quintín en la final.

“Recibimos mucho talento mexicano y además atinamos con la elección de los refuerzos. Y qué decir del cuerpo técnico que inició con Sergio Omar Gastélum al frente y terminó con Gerónimo Gil sin que esto afectara.

“El año pasado se fue Víctor Bojórquez como campeón y llegó Gerónimo, Salón de la Fama con experiencia en Grandes Ligas, pero sobre todo una gran persona”, analizó el gerente deportivo de la organización, José Águila Sández, en torno a las claves del bi campeonato.

Por su parte, Gerónimo Gil dio el mayor de los créditos a sus peloteros.

“Empiezo con el pie derecho gracias a la oportunidad de los jefes, los dueños que confiaron en mi trabajo, pero todo se lo debo a los muchachos, mis jugadores…”, dijo el ex jugador de los Orioles de Baltimore.

En la final, resuelta apenas en seis juegos, Yousamot Cota resultó el Jugador Más Valioso al responder en playoffs con promedio de .378, dos cuadrangulares y 11 producciones en postemporada de la Liga Norte de México

“Para mí fue una temporada muy buena. Vine a trabajar en busca de estos resultados y es una bendición poder terminar campeón. La armonía y la unión del equipo se notó en el campo de juego”, consideró el también jugador de Diablos Rojos y Oaxaca.

Otro elemento sobresaliente fue el cerrador, Luis Ramírez, quien realizó labores de preparador en temporadas anteriores.

“Estaba disponible para cualquiera de los trabajos que me diera, como preparador o cerrador, en ambos tengo experiencia tanto en Liga Mexicana como en la Liga de Invierno de Venezuela. Me mantuve sano y eso fue importante”, resaltó.