APUNTES PERDIDOS

Por Marco Antonio Domínguez Niebla

Autogol. Eduardo me ofrece el número telefónico de Kikín. El boxeador es una de las cartas fuertes que el promotor piensa presentar en su cometido de destituir a Ray, el comisionado que lo inhabilitó un año por ausentarse de la más reciente función realizada el 9 de octubre, sin pagar los salarios de un grupo de boxeadores de San Quintín y Tijuana. De acuerdo a lo dicho por el empresario, el testimonio del peleador mexicalense es clave para «desenmascarar» al comisionado. Entiendo lo que me quiere decir y también entiendo hacia dónde va en un intento más por apelar su sanción, pero no lo interrumpo y lo dejo continuar. Enseguida relata que el 10 de julio Kikín llegó diez kilos por encima del límite de la división en la que pelearía contra el Soruyito Ortega, pero como necesitaba el dinero, optó por sobornar al comisionado, que habría aceptado la coima a cambio de permitirle subir al ring como protagonista del combate estelar de esa cartelera. Y no sólo eso, el responsable de ofrecer aquella función, agrega: Kikín está dispuesto a venir a Ensenada para explicar que la idea de ofrecerle esa cantidad al comisionado fue suya y que además acordaron alterar la báscula. También me asegura que Kikín es capaz de enfrentar a Ray López para acusarlo en un «palabra contra palabra» de que su historia es real y no lo mueve otro interés que hacerle justicia al boxeo de Ensenada librándolo de gente sin escrúpulos. Trato de soportar el relato hasta el final, pero todo tiene un límite. Y éste llega cuando comenta en el lugar (un café al que he sido convocado para una rueda de prensa) que Kikín podría volver a Ensenada para pelear la revancha contra Soruyito. Entonces me veo obligado a recapitular: Kikín, el boxeador que llega a un compromiso profesional diez kilos por encima del límite de su división y que admite haber ofrecido un supuesto soborno para no perder la bolsa que le fue ofrecida sin más prueba que su palabra, su honorabilidad, ¿piensa regresar a Ensenada en busca de revancha tras ser derrotado por Soruyito? Y lo que es peor, ¿habría alguien capaz de contratarlo? Suficiente hasta ahí. Con Ray, el comisionado cuya integridad ha sido cuestionada hasta la saciedad desde que inició este caso, ya platicaré sobre el tema cuando le ponga fecha y hora a la rueda de prensa que tiene contemplada dentro de unos días; horas, tal vez. Sobre la propuesta inicial del promotor, sólo tengo un par de cosas por decir: Gracias, Eduardo, suerte en tu trámite de apelación, pero no, no ocupo el número de Kikín.