APUNTES PERDIDOS (El misterio de las albercas y la campeona mundial)
Por Marco Antonio Domínguez Niebla
El boletín dice: “Con una inversión de casi 7 millones de pesos, el Alcalde Armando Ayala en colaboración con Energía Costa Azul, dieron inicio a la esperada rehabilitación de las albercas de las unidades deportivas Francisco Villa y Raúl Ramírez Lozano”.
12 de julio de 2023.
Para la ocasión, el presidente municipal de Ensenada, Armando Ayala, locuaz y estrambótico como es, se puso un casco y también puso manos a la obra. Obviamente solo procedió a dicho montaje para la toma de las debidas fotografías, porque luego de esa mañana de julio, por la alberca de la Francisco Villa, ni las luces de él ni de Sergio, su regidor del deporte, a quien orgullosamente presume como su primo-hermano; ni mucho menos del ex campeón del mundo de boxeo que quiere presidir Tijuana y que para tal efecto ha tomado la dirección del deporte del estado como trampolín, El Terrible Morales.
Escribo esto el 17 de noviembre del mismo 2023, más de cuatro meses después de aquella escena.
La rehabilitación de esa alberca y de la que se encuentra en la unidad bautizada en honor al tenista más importante del país, nacido en un trozo del territorio mexicano llamado Ensenada, sigue en curso. Y los nadadores esperando.
Tal vez las dos tronaron al mismo tiempo. Tal vez fue cosa del destino. Tal vez las malas administraciones a cargo han derivado tal problemática. Tal vez tantas cosas. El hecho es que de las dos albercas públicas de Ensenada, ningún funciona.
“No pedimos más que se mantenga la infraestructura que necesitamos. Tenemos dos albercas y no funciona ninguna. No pido entrar gratis, solo necesito que la alberca esté disponible para entrenar”, dijo la triatleta ensenadense Estefany Segura,
“Si quieren arreglar las albercas, está bien, pero déjennos una y cuando la terminen hagan el cambio a la otra. A mí me cerraron la alberca dos meses antes del mundial y nadie fue para consultarnos a los usuarios”, agregó la campeona mundial en Pontevedra, España.
Invitada en AGP Podcast, continuó su postura sobre las limitantes encontradas en un municipio cuyas autoridades se especializan en echar a andar obras que difícilmente se consuman, de acuerdo a los tiempos proyectados durante sus ceremonias auto-promocionales.
“En ese momento no sabían ni quién era yo, aunque ya estaba en el mapa de las instituciones que manejan esto. Me llamaron a la Gala Deportiva del año pasado a darme un premio y tal vez no fue nada para ellos. Pero si mi nombre estaba en esa lista, por lo menos debieron haber pensado si seguía entrenando para ir al mundial”.
“(Con el campeonato del mundo) lo que quedó el alto fue el nombre de la ciudad. Pero nadie se pone a pensar en lo que hubo detrás. Ahora tal vez muchos quieran el título de esto”, apuntó el mismo día y pocas horas después que el alcalde y su regidor y su director de instituto anunciaron algo llamado Salón de la Fama, promovido, según dijeron, para honrar a los talentos deportivos de Ensenada.